Descripción
¿Qué pasaría si descubres el poder de la música aun cuando el sentido más imprescindible para disfrutarla (el oído) te falla? Esto es lo que le ocurre a Shaelín, una niña que vive en una realidad imaginada, en Sémola, una ciudad del planeta Jenofonte.
La música como la conozco, la primera novela de Juan Carlos Molina, relata la vida de esta chica que, a pesar de las dificultades, logra hacerse su propio camino.
Es un viaje por el arte musical, por la amistad, la tecnología y la propia identidad. Una historia que «tiene lugar en una etapa de reconstrucción institucional, cultural, cívica y social» y que aborda la amistad como la mayor fuerza del universo.
Fragmento La música como la conozco:
Casi siempre, las cosas que tenemos que hacer en la escuela son un fastidio. En general me gusta ir a la escuela, pero no me gustan muchas de las actividades de aprendizaje que se deben realizar. No me gustan los jueguitos didácticos. Para mí, cuando lo primero que vemos al entrar al salón es al profesor con unos aros de hula hula, o con un dado gigante, o cualquier otro objeto que garantice que nos van a tratar como niños tontos, se traduce en un mal día en la escuela. Es decir, sí, somos niños. Pero ¿de verdad lo somos?
Me gusta aprender. Realmente me gusta. Pero a mí me gusta aprender en libros o en explicaciones, que siento que me hablan directamente. Entiendo que la forma en la que yo aprendo no es necesariamente la correcta, porque tal vez no exista una forma correcta de aprender. Es posible que los demás necesiten este tipo de dinámicas para asimilar los conocimientos. Y está bien. Trato de ser empática, trato de pensar en el bien de los demás. Pero yo no soy los demás. De verdad que no.